A partir de la mitad de tu embarazo, tendrás que irte despidiendo de tu ropa normal y comenzar a comprar ropa de maternidad. Al principio puede ser un poco complicado encontrar las tallas y las prendas que mejor te queden, ya que tu cuerpo está sufriendo rápidos y numerosos cambios. Al filo de los meses, irás viendo que se necesitan sobre todo prendas relajadas y de materiales suaves, para proteger tu panza y hacerte ver increíble.
Lo primero que tienes que tener en tu clóset es un buen suéter para salir por las mañanas y cubrirte en las tardes. Evitar los resfriados es básico. Elige uno café y uno negro, y prefiere uno que pueda abrirse para que cuando sientas calor bajes el cierre sin complicaciones.
En otoño todavía estarás usando playeras de manga corta, probablemente con un suéter arriba cuando refresque. Elige cuatro o cinco tops en materiales muy suaves, como el algodón, para que no tengas comezón en la panza, y elige los estampados que más te gusten, que te hagan sentir súper guapa y segura. Las rayas marineras nunca pasan de moda, y en negro y gris los puedes combinar con jeans de diferentes colores.
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